¿Cómo reconocer la voluntad de Dios?


Escrito por Daniel Kolenda – Cristo para todas las Naciones 
 (Traducido y adaptado)

Hay muchos libros en el mercado hoy en día sobre superación personal y  éxito personal. Nos dicen lo bueno de aprender a cambiar nuestras actitudes de malos a buenos hábitos, y nos vaticinan que el resultado final será riqueza, salud, plenitud y felicidad. Muchos de los principios que enseñan son verdades espirituales realmente universales tomadas de la palabra de Dios y luego adaptados a una amplia diversidad de aplicaciones. Nos animas desde los anaqueles de las librerías, virtuales o no, nos dicen: ¡ "usted puede hacerlo! ¡usted puede hacerlo!"
No es la intención de este mensaje desafiarte a  "crecer", "desarrollar", "alcanzar", o "cambiar", es mucho más profundo, es animarte a entregar tu vida a Dios. Si la filosofía de "Usted puede hacerlo" fuera cierto, no haría falta el Espíritu Santo, ¿no? La mentalidad de "Usted puede hacerlo" debe sustituirse por otra, que esencialmente dice: "no puedo hacerlo por mi cuenta, pero puedo hacer todas las cosas por medio de Cristo. Con su ayuda y bendición todo es posible." Encontrar la voluntad de Dios siempre requiere fe para lo imposible y una dependencia infantil de Él. La Biblia está llena de historias de hombres y mujeres que encontraron su destino en la perfecta voluntad de Dios haciendo cosas que eran imposibles de lograr por su propia cuenta.

Revisemos algunas.

Abraham y lo imposible de la promesa recibida
Abraham era de edad avanzada cuando Dios le dijo que iba a tener tantos descendientes como las estrellas del cielo y las arenas del mar. ¿Cómo podría suceder tal cosa? Él y su esposa, Sara, eran demasiado viejos para que esto fuera posible. Sin embargo Abraham creyó en su corazón que Dios era fiel y capaz de cumplir sus promesas. Así él llegó a ser el "padre de muchas naciones" como el Señor le había dicho, aunque, desde el punto de vista biológico puramente natural, era imposible.

Noé y su loco proyecto
Dios ordenó a Noé construir un barco del tamaño de un portaaviones ¡a mano! El arca era enorme, lo suficientemente grande para contener todo tipo de animales antes del diluvio global. Imaginar la mera posibilidad de construir ese tamaño de nave a mano, y luego reunir todos los animales, no cabe en nuestra lógica mente. Sin embargo Noé lo hizo con la ayuda de Dios y su gracia. Los ingenieros han estudiado las dimensiones bíblicas del Arca y encontrado que su diseño fue perfectamente proporcionado para navegar en el océano. Hace miles de años el arca utilizó principios de ingeniería y construcción naval que han sido descubiertos recientemente. Noé nunca hubiera podido calcular esas cosas por sí mismo, pero Dios le instruyó cómo construir el barco perfecto. Noé sólo tenía que escuchar y obedecer. La gente de esos días debió haber pensado que se había vuelto loco, o que el sol del desierto afectó su entendimiento viéndolo década tras década trabajado en ese enorme barco. Pero cuando las aguas comenzaron a subir y  la inundación cubrir todo, Noé se deleitó de su trabajó  y  se contentó en haber seguido las instrucciones detalladas de Dios.

Moisés y la zarza ardiente
Moisés tenía ochenta años cuando Dios lo llamó desde una zarza ardiente que no se consumía. Allí le mandó sacar aproximadamente dos millones de personas de Egipto y llevarlos a la tierra que había prometido a Abraham más de setecientos años antes. Moisés tenía un montón de razones para creer que era impropio para el trabajo. Era demasiado viejo, muy tímido, y tartamudo. Nadie lo escucharía. Faraón probablemente lo mataría. ¿Y cómo organizaría y lideraría tanta gente, en el imposible caso de que Faraón lo dejara?, ¿cómo sería capaz de dirigir y cuidar de dos millones de personas en el caluroso desierto, sin comida ni agua? Sin embargo a pesar de estos obstáculos enormes Moisés fue simplemente enviado a su destino, obedeciendo en lo mejor de su capacidad, y dejando que Dios hicieron el resto. La historia de la fidelidad de Dios, la disposición y la protección en el libro del Éxodo es uno de los relatos más notables en la Biblia.

María y su embarazo imposible
Una joven llamada a María fue visitada por el ángel Gabriel. Él le dijo que ella había encontrado gran favor con Dios y había sido elegida para dar a luz al Mesías de Israel. Pero ella era todavía virgen, y entonces preguntó cómo podría ocurrir tal cosa.  Sin entender, ella se sometió a la voluntad de Dios, aunque sin comprender a cabalidad lo que estaba sucediendo. Como resultado, dio a luz y crio al unigénito Hijo de Dios.

La lista de personas en la Biblia que Dios llamó a hacer cosas asombrosas es mucho más extensa. A lo largo de la historia Dios ha escogido siempre gente muy común para hacer cosas inmensamente extraordinarias. Algunos fueron hombres, mientras que otros eran mujeres. Algunos eran jóvenes y otros viejos. Otros eran bien educados, y algunos casi analfabetos. Pero todos ellos tenían algo en común: todos había sido llamados por Dios para ser parte de algo mucho más grande que ellos. Debido a su disposición de simplemente renunciar a ser ellos mismos y entregar su ser y su voluntad a quien les había creado. Permitió, una y otra vez que Sus propósitos se cumplieran través de ellos. Dios los usó  sobrenaturalmente. La Evangelista sanadora Kathryn Kuhlman dijo una vez, "no son vasos plateados que está pidiendo. No se trata de vasos de oro que él necesita. Sólo quiere vasos que se rindan a Él ."

¿Están dispuestos?

Tu hermano en Cristo

Pastor Roosevelt Altez M.E.T.



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